El mercado asiático no muestra ninguna dinámica en el comercio de hoy. Solo el S&P/ASX 200 de Australia y el Shanghai Composite de China registraron un crecimiento del 0,29 y el 0,39 por ciento, respectivamente. Otras métricas revelaron una disminución. Incluyendo el índice Hong Kong Hang Seng, que perdió un 0,79 %, el Shenzhen Composite, que cayó un 0,53 %, el Nikkei 225 japonés, que cayó un 0,37 %; y el coreano KOSPI, que cayó un 0,11%.

El empeoramiento de la situación provocada por la propagación de la COVID-19 en China es uno de los factores que preocupan a los operadores. La semana pasada, se observó un número récord de episodios diarios de infección. Ya se han implementado varias medidas restrictivas de cuarentena en algunas ciudades importantes debido al aumento repentino de la morbilidad. A los inversionistas les preocupa que puedan dañar la expansión económica de la nación. El anuncio de las autoridades de nuevas iniciativas estatales para apoyar la economía no logró calmar a los operadores.

Sin embargo, los analistas suelen predecir que las cosas mejorarán pronto en los mercados chinos. El próximo año, la situación debería estabilizarse, según los expertos. Basan su predicción en lo que ha sucedido en otras naciones donde han ocurrido hechos similares.

La mayor disminución de la cotización se observó para los siguientes componentes del índice Hang Seng de Hong Kong: acciones de Baidu, una caída del 3,4%; Meituan, un 3,1% menos; Tencent Holdings, un 3% menos; y Net Ease, un 2,5% menos.

Las cotizaciones bursátiles de las empresas que cotizan en la Bolsa de Valores de Shanghái también reflejan un crecimiento en ese momento: Gemdale Securities aumentó un 9,7 %, Greenland Holdings aumentó un 7,5 % y China Vanke aumentó un 6,9 %.

Para frenar la recesión en este sector económico, el gobierno chino aprobó este mes un paquete de políticas destinadas a ayudar al sector de la promoción inmobiliaria. Con una contribución de alrededor del 25 %, esta industria se encuentra entre las más grandes del PIB de China.

Por 162 mil millones de dólares, los bancos han abierto nuevas líneas de crédito para empresas de desarrollo. El Industrial and Commercial Bank of China, uno de los mayores bancos chinos, anunció la apertura de líneas de crédito para doce empresas por un total de 655.000 millones de yuanes (unos 95.000 millones de dólares).